Directivos y trabajadores de todas las sucursales del país, refuerzan las medidas para la prevención del Covid-19, las cuales deben propiciar la protección adecuada de clientes y trabajadores, para ello desde que comenzó el estado de alerta, los cajeros que manipulan el efectivo y atienden directamente a la población, utilizan nasobucos como medio de seguridad; se organizan las sucursales internamente para evitar aglomeraciones de clientes y se colocan envases con soluciones cloradas y/o alcohólicas a la entrada de los bancos, para el lavado de las manos y antebrazos antes de entrar a realizar las operaciones.
En apoyo a las medidas tomadas por el Estado cubano, se hace un llamamiento a la población para que se utilicen los Canales de Pago Electrónicos con el objetivo de reducir al mínimo las visitas a las sucursales bancarias.
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