Este 13 de septiembre, la jefa de la delegación cubana Katerine Aliño Carballo, y vicepresidenta del Banco Central de Cuba participó en la Conferencia de Programación Global del Fondo Verde del Clima que sesionó en Incheon, Corea del Sur.
Su intervención se centró en propuestas que podrían mejorar los mecanismos de acceso al FVC, a través del programa de habilitación de este organismo. Para Cuba, es esencial una gestión eficaz de los recursos financieros que contribuyen al enfrentamiento del cambio climático. La financiación climática es clave para hacer posible la transición hacia una economía menos intensa en emisiones y para lograr un desarrollo resiliente ante las variaciones del clima. Estos propósitos están nacionalmente consagrados en las bases del Plan de Desarrollo Económico y Social, y en el Plan del Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático, adoptado por el gobierno cubano en abril de 2017, y conocido en el país como Tarea Vida.
El sector bancario, se encuentra en una posición estratégica para influir significativamente en la protección y cuidado del medio ambiente a través del redireccionamiento del flujo de capitales hacia proyectos y empresas con mayor responsabilidad ambiental.
Los elementos abordados contemplaron los proyectos de habilitación del Fondo Verde, que han jugado un importante papel para elevar la preparación para el acceso al financiamiento climático, pues se requiere flexibilizar el mecanismo para hacerlo menos rígido, burocrático y complejo, en aras de lograr una mayor agilidad en la respuesta a las necesidades nacionales. En ese sentido, se consideró la posibilidad de pasar a un sistema mixto de programación multi-años sobre líneas prioritarias previamente definidas.
Además sugirió, que los ciclos de actualización del Programa País con el Fondo Verde se encuentren sincronizados con el ciclo de 5 años de las contribuciones nacionalmente determinadas de los países; y que a su vez exista la posibilidad de que el ciclo de programación pudiese “capturar” de forma más flexible las necesidades de fortalecimiento de capacidades para la producción nacional de los informes bienales de transparencia y los resultados de la revisión técnica a que estos sean sometidos en el proceso de verificación internacional.
Resaltó la importancia de fortalecer las capacidades claves para el acceso directo al GCF, recomendando la búsqueda de mecanismos para lograr una mayor consistencia entre el Readiness y otros procesos del Fondo.
