Banco Central de Cuba
2021-06-01
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Imagen relacionada con la noticia :Las funciones de los bancos y el rol  de la supervisión bancaria

Por: Mercedes López Marrero

De acuerdo con la definición del programa de educación financiera de ASBA en 2019: “Un banco es toda empresa que, autorizada de acuerdo con la ley del país donde se encuentre, se dedica a realizar en forma habitual la intermediación de recursos financieros. “Es decir, por un lado, capta o recibe dinero del público y, por el otro, presta esos fondos a empresas, familias, individuos y gobiernos. Los bancos pagan una compensación por los depósitos que reciben y obtienen un beneficio por los préstamos que otorgan. “Por este proceso de intermediación financiera, los bancos reciben beneficios expresados en tasas de interés, también conocidas como precio del dinero, que expresa el costo asumido por tomar préstamos. “Cuando una persona recibe dinero en préstamo, el banco le está permitiendo satisfacer necesidades en el presente y eso tiene un costo. La tasa de interés que cobran los bancos a los tomadores de préstamos se denomina tasa activa.

Por otro lado, la tasa de interés que pagan las entidades financieras a los depositantes se denomina tasa pasiva”. La captación y colocación de fondos propicia que el banco preste un servicio a favor del desarrollo de la economía, el cual demanda la adecuada gestión y supervisión de los riesgos inherentes definidos como aquellos que, “por su naturaleza, no pueden separarse de la actividad bancaria”. Entre ellos se encuentran: el riesgo de crédito, de liquidez, de mercado, operacionales, moral y reputacional, los cuales se abordan más adelante.

El Comité de Basilea constituye un foro de cooperación habitual en asuntos de supervisión bancaria, que emite recomendaciones aceptadas como buenas prácticas aplicables en la banca internacional, promoviendo la regulación, la supervisión y la gestión de riesgos inherentes a la industria financiera. Está integrado por autoridades de supervisión de los bancos centrales de Bélgica, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Países Bajos, Suecia, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos, Luxemburgo y España. Sus reuniones se celebran en la sede del Banco de Pagos Internacional de Basilea, Suiza, donde está ubicada su Secretaría Permanente. Son observadores la Autoridad Bancaria Europea, el Banco Central Europeo, la Comisión Europea, el Instituto de Estabilidad Financiera y el Fondo Monetario Internacional.

El Comité de Basilea, en su emisión de 2010 revisada en 2011, denominada Basilea III: Marco regulador global para reforzar los bancos y sistemas bancarios, expresa: “Un sistema bancario fuerte y resistente es la base de un crecimiento económico sostenible, ya que los bancos son cruciales en el proceso de intermediación crediticia entre ahorradores e inversores.

Asimismo, los bancos proporcionan servicios críticos a clientes particulares, pequeñas y medianas empresas, grandes corporaciones y gobiernos, que dependen de estos servicios para llevar a cabo sus actividades diarias, tanto dentro como fuera del país”.

En respuesta a los ciclos de las crisis, surgen las redes de seguridad financiera que se inscriben en la

bibliografía con diferentes definiciones. En general, hay coincidencia en que se trata de instituciones e instrumentos destinados a preservar la estabilidad financiera, relacionada con la situación en que el sistema financiero (que se compone de intermediarios financieros, mercados e infraestructura de mercado) es capaz de resistir perturbaciones y resolver desequilibrios financieros, reduciendo con ello la posibilidad de que, en el proceso de intermediación financiera, se produzcan trastornos suficientemente graves como para que la asignación del ahorro a oportunidades de inversión beneficiosas se vea significativamente afectada. Están ordenadas por procedimientos y mecanismos considerados como sucesivas líneas de defensa frente a los riesgos de la actividad financiera, asociados a objetivos definidos tales como:

Regulación prudencial y supervisión: incrementar la seguridad y solvencia de los sistemas financieros, fortalecer la supervisión bancaria, establecer requisitos de capital basados en riesgos, mejorar la eficiencia de las instituciones financieras y promover la integridad de la información.

Prestamista de última instancia: apoyar situaciones transitorias de liquidez en las instituciones financieras y disminuir el riesgo moral que pudiera ocasionar una crisis sistémica.

Esquema de resolución bancaria: identificar situaciones puntuales de insolvencia en las instituciones financieras, con vistas a la aplicación de medidas previamente concebidas para preservarlas en su totalidad o en parte, priorizando el pago a depositantes y ahorristas.

Seguro de depósitos: preservar los intereses de depositantes ante eventuales cesaciones de pagos o quiebras de las instituciones financieras.

La supervisión bancaria dentro de las redes de seguridad financiera permite evaluar la calidad de los sistemas supervisores en busca de mejores prácticas. La expresión procíclica de las crisis financieras en medio de la creciente globalización de la economía deriva en propuestas de mejoras de los marcos reguladores y la actuación de los supervisores bancarios. El Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, en sus orientaciones de 2015 para identificar bancos en dificultades, promueve la intervención temprana del supervisor y la identificación de medidas correctivas y procedimientos en caso de que sea necesaria la resolución bancaria. Antes de arribar a este paso, la alta dirección de la institución financiera es responsable de solucionar los problemas.

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