A. Trabajadores Bancarios
Queridos trabajadores del Sistema Bancario Nacional:
En esta nueva celebración del Día del Trabajador Bancario les transmito el saludo del Consejo de Dirección del Banco Central de Cuba y el mío propio.
Este aniversario mantiene permanentemente en nuestros corazones el honor que significa que el primer Presidente Revolucionario de nuestra institución haya sido el Guerrillero Heroico, Comandante Ernesto Che Guevara.
Bajo la conducción del Che se establecieron medidas de control de cambios para impedir que los ladrones y testaferros del batistato continuaran sacando dineros del país para engrosar sus fortunas, impidiendo que el Banco Nacional de Cuba dispusiera de reservas de divisas para que la Revolución acometiera las grandes transformaciones sociales que requería el país
Con su activa participación se organizó el proceso de nacionalización de la banca en 1960, que puso en manos del Estado revolucionario ese poderoso sistema financiero, así como organizo el canje de billetes de banco que estaban en circulación para sustituirlos por otros que se imprimieron en secreto en un país amigo, lo que constituyo otro poderoso golpe a la oligarquía del país y sus testaferros, lo cual tuvo efecto en agosto de 1961.
Ese honor de que el Che haya sido nuestro primer Presidente revolucionario debe servirnos de acicate a todos los que trabajamos en el Sistema bancario cubano para mantener una conducta honrada y de entrega total, como acostumbro el Che.
Este aniversario lo conmemoramos dentro de importantísimas tareas económicas que impulsa la dirección de nuestro país, y para lo que se requiere la participación decisiva de los trabajadores bancarios. Por citar algunas de ellas, la bancarización, que hoy incluye prácticamente a toda la población del país, y a todos los actores económicos. Nunca será suficiente el dominio que tengamos de las instrucciones vigentes dictadas por el Banco Central de Cuba, y otras complementarias dictadas por los bancos comerciales, para explicar a todos los incluidos las ventajas que ofrecen para unos, y las obligaciones que entrañan para otros. Esta tarea importante es seguida permanentemente por el Gobierno Central y los órganos de gobiernos territoriales, a los cuales los trabajadores bancarios debemos mantener permanentemente informados de los avances y de los obstáculos. Una respuesta equivocada a un cliente, independientemente de su perfil le crea problemas a la bancarización. De ahí la importancia de la capacitación permanente.
El tema de las limitaciones en las disponibilidades de efectivo es otra cuestión importante que enfrentamos, y que paulatinamente iremos resolviendo. Precisamente uno de los objetivos de la bancarización es reducir la utilización del efectivo en las transacciones comerciales que ejecuta la población y los actores económicos.
La atención que concierne a la prestación de servicios el otorgamiento y recuperación a los créditos a los diferentes actores económicos que se dedican a la producción de alimentos es de importancia estratégica para nuestro pueblo y para nuestra Revolución, y casi todas las sucursales están vinculadas a estos actores de una manera u otra. El país hace esfuerzos extraordinarios para lograr incrementos en la producción de alimentos, como lo demuestran la banca de fomento agrícola puesta en vigor y otras disposiciones dictas por el Banco Central de Cuba, el Ministerio de Finanzas y Precios y otras instituciones estatales.
No podemos desatender la captación de ahorro de la población. Son pasivos importantes que requiere el sistema bancario.
Y no por situarlo al final de este escrito deja de merecer hoy la mayor atención la calidad del servicio que prestamos a los diferentes tipos de clientes que se relacionan con las sucursales. Es cierto que hay lugares donde los requerimientos de servicio bancario exceden las capacidades de servicios de que disponemos, pero aun en estos casos tenemos que tener creatividad y compromiso para que los clientes se sientan atendidos. Estar al tentó de sus quejas y planteamientos, y atender las mismas sintiéndonos servidores públicos, nos debemos a nuestros clientes.
El imperialismo con su brutal bloqueo trata de asfixiar a nuestro país, persiguiendo y obstaculizando las transacciones comerciales y financieras que tratamos de realizar, con increíble maldad trata de ahogarnos, y para ello también cuentan con el concurso de vede patrias traidores al pueblo que los vio nacer, pero de Fidel aprendimos que un pueblo como el cubano nunca podrá ser derrotado por el imperio, y en ese ejemplo de lucha y enfrentamiento a los enemigos los trabajadores bancarios, y en primer lugar los cuadros de dirección debemos estar en las primeras trincheras.
Los abrazo en nuestro día.
¡Patria o Muerte!, ¡Venceremos!
Atentamente
Joaquín Alonso Vázquez